lunes, 23 de febrero de 2009

Don Carnal...



Después de que una de las locas con las que vivo me suprimiera (a mis espaldas) mi blog, he decidido apropiarme del suyo para haceros partícipes de mi vida cotidiana.
Llevo meses sin escribir, asi que, espero que entendais que hacerme de nuevo al teclado me resulta un poco complicado (mis uñas de reptil han crecido, si cabe, un poco más). Por ello y porque hoy no me sale del caparazón escribir, publicaré una de mis antiguas historias....
Espero poder usurpar este blog a menudo
Un saludo....Paqui

Aqui os dejo una de las entradas de MI BLOG!!!

Hoy estoy MUY ENFADADA. Vale que no salga el sol y esté todo el día lloviendo (es necesario, ya que estamos en sequía y mis primas las que viven en el agua me contaron en otro día por el msn que estaban realmente preocupadas por el tema) pero que tenga yo que pagar la amargura de mi compañera de habitación por tenerse que pasar el domingo estudiando hace que me entre una mala leche por mis patas traseras que no me soporto. Vamos a ver: ¡¡¡qué culpa tengo yo!!!!

Me he pasado el día reflexionando -sobre mi condición de tortuga- y durmiendo (cuando no sale el sol me da mucha hueva moverme), pero ha llegado un momento en el que me he dado cuenta de que empezaba a levitar y me he propuesto darme unos paseítos por la habitación -para que no se asustara la loca al ver una tortuga volando-. El caso es que estaba yo a mi rollo cuando de repente he escuchado un grito ( me ha echado una bronca que todavía me duelen los tímpanos y, lo que es peor, en casi un año no ha entendido que soy tortuga, NO SORDA); os explico: estaba yo paseando cuando de repente me he encontrado con unos apuntes en el suelo. Yo, que soy una tortuga culta, me he acercado a ellos para echarles un vistazo y luego comentarlos aquí, pero me han parecido tan apetecibles sobre el fondo naranja de la carpeta que no he podido resistirme y les he pegado un bocadito. Bueno...para que queremos más... no le ha bastado con gritarme... ¡me ha quitado los apuntes! Y yo, lógicamente, me he enfadado. He empezado a correr por toda la habitación, he tenido mi momento yogurth con fibra encima de la alfombra solo por joder y he intentado atravesar las botas esas que me pone para no llegar a los cables de un solo salto. El problema es que me he confundido de camino y me he metido dentro de la bota. ¡Ay dios! ¡que agobio! he gritado con todas mis fuerzas, pero me he dado cuenta de que, aunque yo soy una tortuga interactiva, no hablo la lengua de la loca de mi compañera de habitación, hablo, simplemente, tortugo, así que me he tenido que conformar con resignarme a esperar a que se diera cuenta de que estaba atrapada y fuera en mi busca....