domingo, 14 de septiembre de 2008

De aquéllo a lo que llaman tiempo....

"Querido amigo -contestó el agente alzando las cejas-, usted sabrá cómo se ahorra tiempo. Se trata, simplemente, de trabajar más deprisa, y dejar de lado todo lo inútil. En lugar de media hora, dedique un cuarto de hora a cada cliente. Evite charlas innecesarias. La hora que pasa con su madre la reduce a media. Lo mejor sería dejarla en un buen asilo, pero barato, donde cuidaran de ella, y con eso ya habrá ahorrado una hora. Quítese de encima al periquito. No visite a la señorita Daria más que una vez cada quince días, si es que no puede dejarlo del todo. Deje el cuarto de hora diario de reflexión, no pierda su tiempo precioso en cantar, leer, o con sus supuestos amigos. Por lo demás, le recomiendo que cuelgue en su barbería un buen reloj, muy exacto, para poder controlar el trabajo del aprendiz..."

Michael Ende, MOMO




1 comentario:

Beatriz del Hoyo dijo...

Sentimos que nos falta el tiempo, verdad? Pero luego, qué rápido se pasa...